Todavía no puedo borrar de mi mente la imagen de una chica que ocupaba dos asientos de autobús y sorbía con ansiedad los últimos restos de un tanque de café cargado de sudadera barça camiseta de brasil nata. Hasta he estado tentado de pincharles con una aguja para ver si son camiseta argentina 2022 de mentira. No hay que hacer ascos a nada y no ser un mindundis con la comida.